Era la tarde del 16 de agosto de 1969 en una granja de Bethel, por las afueras de Nueva York. Allí, la primera edición del festival de Woodstock se lleva a cabo. En el escenario hay una banda recién salida del horno llamada Santana, liderada por un joven mexicano Carlos Santana. Los ritmos latinos, el rock y el jazz se mezclan a la perfección, hipnotizando a 500.000 hippies en un evento que reunió a la música con la liberación, la paz y el amor.
Han pasado 52 años desde ese día. Con el tiempo, Santana se consagró como una banda legendaria, al igual que su líder. En la actualidad, el grupo mexicano-estadounidense sigue activo, forman parte del Salón de la Fama del Rock and Roll, tienen 25 álbumes en su repertorio y cuentan con numerosos premios y reconocimientos. Pero en el año 1969, todo estaba recién empezando para Santana. De hecho, se presentaron en Woodstock sin tener ni un solo disco publicado.
¿Como llegó Santana a Woodstock?
El festival de Woodstock fue escenario para grandes músicos, tales como Jimi Hendrix, Janis Joplin, The Who, Neil Young, entre muchos otros más. Ahí estaba Santana, un grupo que solo tenía grabado su primer álbum, con un Carlos Santana de 22 años. Fue Bill Graham, el manager de la banda quien aseguró su participación en el mítico encuentro, Bill tenía a su cargo otros artistas de renombre que fueron invitados a Woodstock, por lo que aprovechó para incluir a Santana en las filas.
Hasta ese entonces, la banda solo llevaba tres años tocando. Pero eso no impidió que el concierto en Woodstock fuera inolvidable. Carlos Santana subió al escenario con un par de alucinógenos encima -consumió creyendo que iban a salir en la noche-, unos años después, recuerda el evento: “Para la banda en sí, fue grandioso. Pero en mi caso, era difícil aterrizarme porque había tomado unos psicodélicos fuertes antes de tocar”. Afirma que “Nunca olvidaré la manera en que el sonido rebotaba en un campo de personas. Nunca olvidas ese sonido”.
Unas semanas después del festival, Santana estrenó el disco que habían grabado y el resto es historia. En definitiva, Woodstock fue la gran apertura de oro para la legendaria carrera de la banda, que sigue tan vigente como siempre. Fue un evento que hasta el día de hoy, se conserva en la memoria del rock, de Santana y de todo aquel que asistió a Woodstock.
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