Evelyn Cornejo, una de las cantautoras con más peso actualmente en la escena chilena, habló en exclusiva con LatamRock. Desde un campo en Aldea Campesina cercano a la ciudad de Talca, la artista se refirió a sus grandes maestros musicales y de las constantes comparaciones que le hacen con figuras tan importantes como Violeta Parra y Natalia Lafourcade.
También nos comentó de su vida en pandemia y del impacto que ésta tuvo a la hora de componer nuevas canciones. Respecto a los planes musicales dio una gratísima noticia, pues si todo sale bien a fin de año tendremos un nuevo álbum de la cantante de 40 años de edad autora de temas como “Las golondrinas” y “Los ratones”.
Evelyn Cornejo también recordó esos primeros pasos en la música que estuvieron rodeados de un ambiente evangélico. Ella comenzó tocando en las micros y admite que jamás se le cruzó por la cabeza estar donde hoy está.
Te inspiraste en cosas tan distintas como Los Prisioneros, Violeta Parra y Fiskales Ad Hok. ¿Cómo fuiste recogiendo cosas de cada uno de ellos?
Lo que los une es el contenido, que es bien es social. Cuando yo escucho música me llama la atención y me gusta que tenga una letra potente, cargada de sentido.
Muchos te comparan con Violeta Parra y otras artistas como Natalia Lafourcade. ¿Te acomodan estas comparaciones?
Me siento totalmente halagada. Violeta Parra es exponente mundial impresionante y Natalia una gran voz latinoamericana y reconocida en todos lados. Aunque nunca había escuchado que me compararan con Natalia Lafourcade (risas) pero es un “honorazo” para mi.
¿Cómo te tiene la pandemia? ¿Viene nueva música? En qué ha afectado el mensaje de tu música…
He aprovechado este tiempo para descansar, porque la vedad no he parado. Retomé composiciones que tenía abandonadas hace años y ahora pude terminarlas. También creé cosas nuevas que estoy grabando en mi casa, en un estudio casero. Estoy trabajando con el Pájaro Araya que me ayuda en la producción de algunos temas. Alfonso Pozo me está ayudando con los arreglos de otro tipo de canciones, sobre todo las folklóricos. Ojalá el nuevo disco salga a fines de este año. Yo no necesito mucha parafernalia para grabar, entonces les envío mi voz y guitarra y ellos le agregan lo suyo. Ahora el 21 de mayo estrenaré en Spotify una nueva canción llamada “La Mariposa”.
¿El encierro ha hecho que tus letras sean aún más directas y confrontacionales? O te ha cambiado un poco…
Ha sido un período reflexivo para procesar hartas cosas. Antes estaba todo el día de gira y no me daba esos espacias. Ahora me pude detener a pensar. Obviamente la rabia y el descontento social continúan más vivos que nunca dada las condiciones miserables que nos están haciendo vivir las autoridades y no solo en Chile, si no que en todo Latinoamérica. Mis composiciones siempre va a tener que ver con ese sentimiento.
Tú partiste tocando en las micros, en la calle misma. Además vienes de una familia muy ligada a lo evangélico… ¿Cómo recuerdas esos inicios?
Amén (risas)… Lo recuerdo con harto con cariño porque fue mi escuela. La primera canción que aprendí a tocar fue una evagélica porque estaba en el coro infantil. Los evangélicos son súper buenos para tocar instrumentos y ahí, en la Iglesia, di mis primeros pasos. Luego en liceo me metí a un curso de música y aprendí un poco más. Después, cuando salí, me puse a tocar en las micros y así estuve como diez años. Aprendí mucho de folklore latinoamericano, porque suena súper bien con una guitarra desenchufada. No necesita nada más. Además a la gente le gustaba mucho. Tocaba hartas canciones de Violeta Parra y la gente en el campo cantaba esas canciones y se llenaban de recuerdos. Tengo gratos recuerdos de mi época en las micros .
¿Te imaginabas en ese minuto que años más tarde serías de las voces chilenas más importantes?
Nunca pasó por mi cabeza. Yo cantaba porque me gustaba cantar y porque ganaba más plata (dinero) que trabajando como asalariada. Me iba súper bien y por eso empecé a componer. Me di cuenta que a la gente le gustaba. Fue como una bolita de nieve que fue creciendo. Estoy muy agradecida de la vida por darme la oportunidad de “ganarme los porotos” con lo que me gusta hacer.
Además de todo lo que sucede tu también estás comprometida con distintas causas, como la mapuche. ¿Eres de las personas que ve el futuro con optimismo o visualizas todo gris?
A veces uno se deprime y mira todo oscuro. Yo creo que eso le pasa a todo el mundo, el sentirnos decepcionados de nuestra propia especie por el daño que le hemos hecho a nuestro planeta y a otras especies que les quitamos su lugar donde vivir. Le hemos quitado todo al planeta por nuestra visión de supremacía humana, de pensar que somos superiores al resto, a los árboles y a los animales. No tenemos la capacidad de comprenderlos. Nos falta tanto para desarrollar la conciencia y no sé si algún día podremos concretar el sueño de un mundo armónico. Por otra parte está el despertar de la gente saliendo a las calles. En todo el mundo la gente se está rebelando porque este sistema económico es insostenible e injusto. Genera demasiada tristeza en la humanidad. Pero eso genera muchas ganas por luchar y seguir adelante y eso me genera una dualidad de emociones.
Ahora tendrás la oportunidad de tocar de nuevo con público en un show que después podrá verse por streaming. ¿Cómo te tiene eso?
Muy contenta y emocionada. Hace mucho tiempo que no toco con gente. Los conciertos ahora son por internet y es muy raro porque estás sola en una pieza y tienes que hacer como si huera gente. Por eso me tiene muy contenta esta posibilidad porque también podré compartir con gente de la banda. (Revisa toda la info del próximo concierto de Evelyn Cornejo en las redes sociales de Gira Pueblos).
Evelyn Cornejo llamó la atención del mundo entero con una lírica directa, que no esconde nada y que va de frente. Su crítica social siempre deja cosas para analizar y, si todo sale bien, a fin de año podremos disfrutar un nuevo álbum de la chilena.