Hace un año el periodista mexicano, Miguel Gálvez, inició la campaña para que Soda Stereo tome un asiento en el Salón de la Fama del Rock and Roll. A través de colaboraciones con colegas y otros fans, armó esta iniciativa y una petición que hoy reúne más de 15 mil firmas. Además, logró conseguir el apoyo de varias figuras de la industria musical. El más reciente es Seye Adelekan, bajista de Gorillaz, quien se sumó a la causa el pasado 1 de septiembre.
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El músico conoció a la histórica banda argentina cuando estudiaba en Ecuador, allí se percató de su trascendencia: “Yo soy un británico nacido en Nigeria que ama Soda Stereo“. Mencionó que “no hay que pensarlo mucho para creer que deberían estar (en el Hall)”. Otros destacados artistas también han entregado su aporte a la campaña, tales como Francisco González (Lucybell), Adrián Barilari (Rata Blanca) y Mario Breuer (productor e ingeniero de sonido, trabajó con Soda Stereo, Charly García, Los Tres y muchos más).
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El gran Carlos Alomar -guitarrista de David Bowie, productor del álbum “Doble Vida” de Soda- ha sido un aliado importante en la campaña. En una reciente entrevista con Los Angeles Times expresó: “Somos muchos, y queremos tener voto en esto. ¡A los latinos también nos gusta el rock, maldita sea! Y queremos que nos represente Soda Stereo. Que sean reconocidos a nivel internacional es su derecho, y también el nuestro.”
¿Cómo puede llegar Soda Stereo al Salón de la Fama?
Para que el grupo de Cerati, Zeta y Alberti acceda al Salón, debe tener mas de 25 años de trayectoria. Además, se evalúa su impacto en el mundo del rock and roll, junto a su excelencia musical, profundidad e influencia sobre otros artistas. Estos requisitos son analizados por el Comité de Nominados. No se toman en cuenta los números de ventas ni de los discos lanzados, tampoco se considera el prestigio del sello o los premios recibidos.
Soda debe ser postulado por algún integrante de la Comisión de Nominados, si son aprobados entran a una lista de nombres con otros artistas que también pasaron. La boleta se entrega al Comité de Votación, formado por artistas del Hall y miembros selectos de la industria. Allí, Soda Stereo debe ser elegido por sufragio y ya tendría listo su asiento en el Hall. Los fans también pueden votar, pero su participación es limitada, al igual que su influencia en el resultado final.
En definitiva, es un largo camino para llegar a un espacio de prestigio que no parece ser muy justo. Hasta ahora, Ritchie Valens y Santana son los únicos latinos en el Hall y eso fue hace más de 20 años. Al final, no se trata solamente de premiar la trayectoria e influencia de Soda Stereo, es sobre la representación latina en la industria del rock, una realidad que aún parece lejana. Sin embargo, con el arduo trabajo de la campaña y el creciente apoyo que recibe, es posible hacer historia y poner a la primera banda hispanohablante en el Salón de la Fama.